¿Fácil?

Bueno, según se vea. El caso es que el domingo toca el R. Madrid con todas sus bajas (y nosotros con las nuestras), y ha venido bien que el esfuerzo no fuese excesivo. Ya con aguantar en la grada quienes quisimos estar por allí, era meritorio. Vaya nochecita de frío a ratos y de agua en el descanso para tener que buscar algo con qué secar tu asiento.
Por cierto, ¡vaya tela con Jesus Navas en manga corta! (luego le sustituyó Fdo. Navarro en las mismas, igual que el 3 partizano). ¡Qué ganas de aguantar frío!
La cuestión importante es que algunos de los lesionados comienzan a coger ritmo. Drago jugó todo el partido sin problemas, Capel sesenta y tantos minutos en plan Guadiana, pero estando en su sitio, Duscher mandando por el centro atrás y Konkó en su banda gustándose a ratos.
Y el domingo ya está aquí. A las nueve comienza la oportunidad de decir claramente, no en los micrófonos sino en el cesped, a qué aspiramos. Pero teniendo en cuenta lo que ya comenté, quedarán 24 partidos por jugar cuando a las 23´45 horas ("chispa más o menos") el arbitro diga que se acabó lo que se daba.
A ver si el domingo todo resulta tan fácil como hoy.
(En la peña se vará estupendamente ;) )